Fuente: osasuna.es |
En el día de ayer se hizo oficial
un secreto a voces: Nauzet Pérez abandonaba las filas del Club Atlético
Osasuna. Tras llegar ambas partes, club y jugador, a un acuerdo amistoso el
portero rescindía su contrato e inicia, de esta manera, una nueva aventura
profesional. Con su salida, además, culmina un hecho demoledor: de los 25
fichajes realizados en las dos últimas temporadas, 20 ya no militan en el club
rojillo. Buena muestra de la ineficaz gestión deportiva de los últimos años.
En poco se parecen el Nauzet que
llegó a Osasuna del que se ha marchado. El primero fue titular indiscutible con
la escuadra pamplonesa. Aterrizó en la capital navarra junto a Mario para
defender la portería del equipo y formar un tándem de garantías. Nunca llegamos
a saber si dicho tándem ofrecía tales garantías, puesto que Nauzet lo jugó todo
en liga, las 42 jornadas regulares y los cuatro partidos de la fase de ascenso.
Con sus paradas y su carácter, el canario encandiló a la mayor parte de la
afición y a su entrenador, Enrique Martín. Para el recuerdo, los tres penaltis
que detuvo aquella campaña y, entre otros, su enorme parada a Emaná en la ida
de la semifinal del PlayOff que dejó a Osasuna con muchísima vida.
Ya en Primera División, Nauzet
arrancó como titular tal y como cabía esperar. Sin embargo, la portería se
contagió del nivel del resto del equipo y el guardameta rojillo experimentó
algunas actuaciones poco acertadas. Esto llevó a Martín a dar la oportunidad a
Mario, quien solamente había jugado un partido hasta la fecha con Osasuna, en
Copa frente al Mirandés. Con la llegada de Caparrós al banquillo, Nauzet
recuperó su puesto. El juego de pies de Mario ayudó mucho a ello. Cuando
Vasiljevic se hizo con las riendas, y tras la llegada de Salvatore Sirigu, el
banquillo y la grada fueron los nuevos hogares de Nauzet. Pese a que las
actuaciones del internacional italiano no mejoraron excesivamente lo visto
hasta la fecha, el técnico serbio relegó al ostracismo a los dos porteros
propiedad de Osasuna. Una decisión discutible para unos y acertada para otros.
Lo que sí es cierto es que el
paso de Nauzet por Osasuna no ha dejado indiferente a casi nadie. Criticado por
un sector y alabado por la mayoría, el “calvito” (como le llamaba Martín) ha
dejado una huella bajo palos. Casi implacable en el mano a mano y unos reflejos
notables son su seña de identidad. Por el contrario, las salidas por alto y la
toma de decisiones son su gran debe. Bien es verdad que es el punto negro de la
mayoría de los porteros, pero en Nauzet esta debilidad se presenta muy
acentuada. En Segunda sus virtudes compensaban mucho sus defectos, pero en
Primera penaliza demasiado. Y más con una defensa de humo por delante. Él y su
defensa fueron los cuartos menos goleados en la categoría de plata, pero
acusaron de manera escandalosa el salto a la élite.
En los últimos tiempos, las voces
críticas contra Nauzet levantaron el tono para afirmar que el canario no ha
sido tan buen suplente como titular en cuestión de actitud. En Segunda fue una
pieza clave no sólo en el césped, si no también en el vestuario. Su manera de
ser ayudaba a hacer piña gracias a sus bromas y su simpatía. Sin embargo, se
cuenta que actualmente estaba siendo un problema dentro del vestuario. Yo no
digo que esto sea falso, simplemente porque lo desconozco, pero me cuesta
creerlo. Las “informaciones” de diferentes aficionados afirman tanto una cosa,
como la contraria, casi sin término medio. Pero hay dos cuestiones que me hacen
inclinarme a pensar que no es del todo cierto. Una es la ausencia de
información oficiosa al respecto, como sí pasó con Jaime Romero. Otra, su carta
de despedida. Es el primer futbolista que escribe una despedida para la web
oficial esta temporada, y eso dice mucho. Hasta la fecha sólo Berenguer se había despedido de
forma oficial, a través de una rueda de prensa. Del resto, algunos han usado
sus redes sociales para hacerlo y otros ni se han molestado. Además, el tono
tan emotivo de dicha misiva deja ver que le entristece abandonar el club. No casa
demasiado con el perfil de alguien problemático.
Vayas donde vayas, espero que
tengas toda la suerte del mundo, Nauzet. Te ha matado lo mismo que a muchos
otros, este año tan sumamente desastroso. Te mereces lo mejor porque has
demostrado ser un buen portero y una mejor persona. Siempre te recordaremos por
ser el portero del ascenso, porque con tus paradas nos diste muchos puntos. Por
tu risa, por tus bromas y locuras en cada entrenamiento. Por tus vaciles a los
compañeros desde el balcón del Ayuntamiento en la fiesta del ascenso. Gracias,
gracias de verdad por todo. Dices ser un rojillo más y como tal te
recordaremos.
Adjunto un vídeo con algunas de sus paradas el año del ascenso:
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